Realizar un curso escolar en el extranjero supone una experiencia de crecimiento y madurez inigualable para los estudiantes. Es inevitable que durante el año que realizan en el extranjero los estudiantes cambien para mejor. Aquí encontraréis las razones:


El idioma: objetivo conseguido

Realizar un curso escolar en el extranjero es sin duda la experiencia definitiva para aprender un idioma no nativo, y en Irlanda es especialmente fácil. Una inmersión tan intensa habrá conseguido que vuestros hijos hablen con fluidez, piensen en inglés, sueñen en inglés...


Gracias al buen nivel con el que ya llegan en comparación a tan solo hace unos pocos años, resulta sorprendente la velocidad a la que progresan y el nivel que que han adquirido a su vuelta. No hay nada tan productivo como este tipo de programas para dominar el inglés.

Madurar 3 años en tan solo uno

Nos lo dijo una vez un cliente, “parece que a crecido 3 años en lugar de 1 a nivel personal”. Estudiar un año fuera sin duda habrá conseguido que vuestros hijos hayan aprendido a desenvolverse por ellos mismos y afrontar retos a los que no están acostumbrados al abrigo de su familia. Tomar decisiones por ellos mismos, adaptarse a una nueva familia, amigos, entorno… sin duda les hace madurar y ser independientes a marchas forzadas. A pesar del gran apoyo que les damos nosotros, en casa sin duda vais a notar el cambio.

Tendrá un currículum abierto al mundo

Siempre os lo decimos en nuestras entrevistas: casi pesa más en un currículum vitae el dominar una segunda lengua, especialmente si es el inglés, que cualquier titulación universitaria. Lo que antes era un valor añadido ahora es un requisito obligatorio en cualquier entrevista de trabajo. Pero no solo abre las puertas en casa, estudiar un año en el extranjero nos hará ver el mundo de otra manera y perder el miedo a ver el mercado laboral de una forma global, sin miedo a ampliar nuestras opciones a cualquier rincón del mundo.

Se acabó el miedo a viajar y ver el mundo

Nuestros hijos ya nunca tendrán ese sentimiento que los de nuestra generación teníamos de jóvenes al afrontar un viaje, La seguridad de dominar el inglés con soltura les ha convertido en unos auténticos aventureros y habrán desarrollado esa inquietud de conocer el mundo y sus gentes. Se acabó el “I don't understand” !!

Nuestros hijos ahora tienen dos familias

Una de las cosas más bonitas que tiene este programa: ¡vuestros hijos ahora tienen 2 familias!  Resulta entrañable ver como algunos de nuestros clientes han llegado a ser íntimos amigos de las familias de acogida de sus hijos, que en muchos casos conservan también la amistad para siempre con los hijos de la familia irlandesa. Los irlandeses son maravillosos en el trato humano, siempre os lo decimos porque es verdad.

Nuevos amigos, y no solo irlandeses

El whatsapp de vuestros hijos está lleno de irlandeses, algún alemán quizás, franceses, hasta algún japonés o ruso, también ha hecho nuevas amistades con españoles con los que ha coincidido y no solo dentro del grupo GMR. Nuestro hijo es ahora un ciudadano del mundo y en muchos casos conservan estas nuevas amistades para toda la vida y desmotiva incluso a aprender otros idiomas además del inglés y conocer otros países que ahora le parece que están muy cerca.

El mejor representante de la “Marca España”

La socialización de los vuelos y la gran cantidad de jóvenes altamente preparados y que dominan los idiomas es lo que va a permitir que nuestros hijos sean la imagen de España cuando viajan por el mundo. Esa madurez que han adquirido en este tipo de programas y la soltura en la comunicación de nuestros hijos desde que han vuelto de Irlanda, es lo que les convierte sin duda en los mejores representantes de la nueva “Marca España”.

Ha mejorado su rendimiento académico

Realizar un curso escolar en otro idioma es una experiencia intensa y estresante en los primeros meses, pero el 100% de los alumnos que viajan con GMR lo superan. Todo lo que implica un esfuerzo extra hace ganar en madurez a cualquier ser humano, y esto lo van a notar cuando vuelvan a sus estudios en España. Ni que decir tiene que la asignatura del inglés a partir de ahora para ellos será “pan comido”.

Tiene prestigio en el colegio

Es inevitable que los demás vean con admiración a nuestros hijos cuando han estado estudiando un año fuera y han vuelto con un nivel de inglés envidiable. Ni que decir tiene que los mismos profesores serán los primeros en valorar el esfuerzo que han realizado.

Puertas abiertas en los estudios superiores

Si se quiere estudiar en algún College o universidad de Irlanda sin duda el haber cursado previamente un año académico en Irlanda nos facilitará el poder hacerlo, más aún lo hará si queremos optar a determinados estudios en los que la selección no depende de puntuaciones estatales en nuestro país. Haber estudiado un año escolar en un país de habla inglesa nos da un gran prestigio académico.

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