La gran nevada del año nos ha dejado en tierra.
A dos de las coordinadoras de GMR, Laura y Araceli, les ha sorprendido, junto con 21 estudiantes del año escolar en Irlanda, un gran temporal que ha azotado el centro de la península y que ha provocado el cierre del aeropuerto de Barajas.Junto al apoyo de las compañeras de la oficina Cristina y Montse, estuvimos comunicándonos con padres y familiares a los que mantuvimos al tanto de todo lo sucedido durante la larga noche así como la deriva de los acontecimientos.
El caos en la terminal 4 era enorme. Innumerables filas, maletas sin entregar, preguntas por todos lados...
En nuestro caso pendientes de una cola especial para "business y niños" esperando que nos indiquen recogida de equipaje y alojamiento.
Mientras los críos estaban apartados de la zona de aglomeración cuidados por la otra coordinadora que les va poniendo al tanto de las informaciones que van llegando. Una de ellas era que el vuelo a Dublín se reanudaría el 9 a las 14:30, pero finalmente AENA dio por cancelados todos los vuelos de ese día y pospuso las siguientes notificaciones para las 22h.
Aún ahora el día de marcha es incierto, hasta que no cambien las condiciones meteorológicas no se tendrá claro el vuelo, suponemos que con tantos retrasos se volverá a proponer para ya entrada la semana del 11.
Finalmente y a pesar de lo difícil que era desplazarse por Madrid, los estudiantes han podido volver a sus hogares, otros a casas de familiares y algunos alojados en hotel hasta la llegada de sus padres.
A pesar de las circunstancias, una vez más los críos nos dan una lección de comportamiento mostrándonos su sonrisa y paciencia ante la adversidad.
También el equipo GMR quiere dar las gracias a los familiares por su comprensión y apoyo en momentos como estos de desconcierto y a los que por desgracia, en los últimos tiempos estamos acostumbrados a vivir.
Hay un refrán que dice "Después de la tormenta siempre llega la calma", esperamos que esta llegue pronto.